sábado, 31 de agosto de 2013

Nueva Orleans aún recuerda el huracán Katrina, uno de los más letales de EEUU

Este jueves se cumplieron ocho años de que el huracán Katrina, de categoría 5, azotara la costa sureste de Estados Unidos para convertirse en el más costoso y uno de los más letales en la historia de este país
 
Aunque Katrina se desató días antes, lo peor llegó un 29 de agosto cuando tocó tierra a las puertas de Nueva Orleans.
 
Se estima que Katrina causó daños materiales por 75 mil millones de dólares, la muerte a mil 836 personas y la evacuación de más de un millón.  

La devastación de Nueva Orleans se produjo cuando los diques y canales que surcan toda la ciudad no soportaron la fuerza del agua que venía del lago Pontchartrain. 
 
En las horas posteriores al desastre, los equipos de rescate no se daban abasto para localizar y poner a salvo a cientos de personas que pedían ayuda desde los tejados de sus casas, aisladas en medio de la catástrofe.
 
En septiembre del 2005, el 85 por ciento de la ciudad estaba bajo el agua y durante muchos tiempo estuvo inhabitable.
 
La mayoría de los habitantes de Nueva Orleans tuvieron que ser evacuados. Muchos de ellos resistieron dias en el estadio deportivo del Superdome con la ciudad completamente inundada.
 
El fallo de las protecciones de Nueva Orleans es considerado como el mayor desastre de ingeniería civil de la historia de Estados Unidos.
 
Los daños y amenazas ambientales en la salud pública fueron los efectos más duraderos y peligrosos del huracán Katrina.  

El agua contaminada que desbordó las zonas residenciales causó efectos en la salud a largo plazo en los seres humanos, animales y otros habitantes de la zona. 
 
Como consecuencia de los importantes daños económicos, materiales y personales dejados a lo largo de la costa del golfo, el nombre Katrina fue oficialmente retirado de la nómina por la Organización Meteorológica Mundial a petición del gobierno de Estados Unidos.

Proponen que los huracanes lleven el nombre de políticos críticos del cambio climático

Una organización medioambiental de EE.UU. lanzó una sugestiva campaña que propone que las tormentas tropicales pasen a conocerse con el nombre y apellido de políticos críticos con la teoría del cambio climático.

De esta manera, los activistas de la organización 350 Action proponen que la Organización Meteorológica Mundial abandone el sistema actual, que desde 1953 otorga a cada huracán un nombre genérico como Katrina o Sandy. Con el objetivo de hacer realidad la iniciativa, la organización ambiental estadounidense llevó a cabo una recogida pública de firmas y promocionó su propuesta con una creativa campaña audiovisual llamada 'Climate Name Change', es decir, 'cambio del nombre del clima'.

En el vídeo se hace referencia a trágicos huracanes utilizando los nombres y apellidos de reconocidos líderes estadounidenses que son indiferentes al cambio climático o que se muestran críticos con este fenómeno, ya sea negándolo u obstruyendo políticas climáticas.

Uno de los 40 políticos en la mira de la ONG es Marco Rubio  senador republicano para el estado de Florida. "Marco Rubio provoca el estado de emergencia en toda la costa este", se alarma en el vídeo de 350 Action en una noticia ficticia que hace alusión a un huracán homónimo de este político crítico con las actuaciones estatales para frenar el cambio climático. 

Resulta impactante escuchar los nombres y apellidos de políticos para referirse a desastres naturales en un contexto tan cotidiano como un noticiero (aunque sea falso), u oír a las víctimas lamentarse por el paso de catástrofes naturales que llevan el nombre de sus dirigentes.

Texto completo en: http://actualidad.rt.com/actualidad/view/104068-huracanes-nombre-negacionistas-cambio-climatico